"El dinero no es patriótico; se va donde hay rentabilidad", han indicado en relación a paquetes normativos en Europa que fomenten la inversión
MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
DWS, brazo inversor de Deutsche Bank, ha expresado este jueves en un encuentro con los medios su preferencia por los mercados europeos a la luz de un Estados Unidos en el que ven volatilidad, un dólar debilitado, dudan sobre la sostenibilidad fiscal y observan una probabilidad de recesión económica del 50% frente al 35% que valora el mercado.
Así lo ha expresado el jefe de la sucursal española de DWS, Mariano Arenillas, quien ha desgranado que en la gestora están centrando sus labores de monitorización en torno a la renta fija y, más particularmente, en la deuda soberana de Estados Unidos: "En los próximos 4 o 5 años van a tener que volver a emitir deuda que le vence por más de 15 billones de dólares", ha alertado.
En esa línea, ha explicado que esa refinanciación que tiene Estados Unidos en un plazo "tan corto" es lo que hace que Donald Trump quiera que los tipos de interés bajen lo más rápido posible, para que el coste de la deuda emitida sea lo más reducido, en tanto que el nivel de déficit en torno al 7% "claramente no es sostenible".
Arenillas ha circunscrito ante esa coyuntura la debilidad del dólar como divisa y el desvanecimiento progresivo del papel de seguridad de Estados Unidos en el mundo y en los mercados.
En paralelo, ha vaticinado que la tasa media de los aranceles por parte de la Casa Blanca se situé en el 15% y que la Reserva Federal (Fed) no hará movimientos hasta final de año --eventualmente bajarían los tipos al 3,5-3,25%, según la firma-- por una inflación que registrará rebrotes hasta el nivel del 4% en el próximo otoño.
En un plano más amplio, con todo ese cóctel le han otorgado a EEUU una probabilidad de recesión de un 50% -por encima del 35% que estima el mercado-, si bien Arenillas ha matizado que, al calor de la serie histórica, una contracción económica con inflación al alza no es tan negativa para los mercados bursátiles.
Con todo, frente a este esbozo de la primera economía del mundo, Arenillas ha incidido que la estrategia de inversión pasa ahora por Europa y por diversificar: "No cargues la mano demasiado en nada", ha recomendado el ejecutivo.
En relación al Viejo Continente, Arenillas ha descrito que cuenta con catalizadores como los importantes planes fiscales y de inversión encabezados por Alemania, un Banco Central Europeo (BCE) que llevará los tipos de interés a un nivel de neutralidad que han cifrado en el 1,75% y un cambio en los flujos de capitales, que salen de Estados Unidos para volver al mercado común.
"Pensamos que Alemania está en el punto de inflexión", ha ahondado sobre el país de origen de DWS para incidir que ya debería haberse dejado atrás lo peor en el sector manufacturero, de vital importancia para una economía que es exportadora, y que el sentimiento del empresariado teutón también está reforzado por los planes de gasto.
"Con el paquete fiscal alemán es de esperar que en cinco años la deuda sobre PIB suba del 60% al 80%", ha comentado sobre el margen que tiene el Gobierno de Frederich Merz para incentivar la economía y ser la locomotora europea; de hecho, la previsión de la firma es que Alemania crezca un 1,6% en 2026.
Aterrizando estos asuntos en las carteras de renta variable, Arenillas ha apuntado que el mercado europeo --de aquí a un año subiría un 7%-- ofrece buenas valoraciones y que se decantan por las cotizadas de tamaño mediano y pequeño, así como sectores como salud y entidades financieras, mientras que en Estados Unidos la conjugación de beneficios esperados y múltiplos dejan un espacio pequeño para las revalorizaciones.
En lo referente a la estrategia en renta fija, Arenillas ha expresado su positivismo porque, pese a las bajadas de tipos, todavía ofrecen la capacidad de batir a la inflación; especialmente, a su juicio, en bonos corporativos europeos de alta calidad ('investment grade', en la jerga) por las rentabilidades esperadas del 3%.
Además, ha enmarcado que, en algunas cotizadas, esta tipología de deuda está ofreciendo más rentabilidad que el dividendo de esas mismas empresas. Por otra parte, Arenillas ha indicado que los bonos 'high yield' no son aconsejables al no compensar el mayor riesgo que hay asumir.
"EL DINERO NO ES PATRIÓTICO; SE VA DONDE HAY RENTABILIDAD"
Finalmente, Arenillas ha considerado que las mejores previsiones económicas sobre la eurozona y sus distintos estados miembros deben venir acompañadas de un "espíritu político" que dote flexibilidad y medidas fiscales positivas.
"El dinero no es patriótico; se va donde hay rentabilidad", ha sentenciado para enmarcar la importancias de iniciativas que fomenten la inversión bursátil de ciudadanos y entidades europeas en sus propias economías y empresas.
Por ello, ha citado medidas que están en fase de estudio y preparación, como la etiqueta europea a productos financieros, que otorgarían un mejor tratamiento fiscal a cambio de invertir en Europa, o una cuenta de inversión a nivel particular con estos mismos rasgos para que el mercado minorista coja tracción y sea otro impulso en los mercados.
"Todo depende de cómo se monten todas estas paquetes normativos que esperamos que lleguen", ha aventurado a la espera de más noticias desde los organismos públicos.