MADRID 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Comité de Política Monetaria (MPC) del Banco de Inglaterra ha decidido este jueves mantener el tipo de interés de referencia para sus operaciones en el 4%, su nivel más bajo desde marzo de 2023, según ha anunciado la institución.
La 'Vieja Dama' de Threadneedle Street volvió a mostrarse algo dividida, ya que la decisión del órgano rector fue adoptada con siete votos a favor, mientras que dos de los nueve miembros del Comité preferían bajar el precio del dinero al 3,75%.
Asimismo, el MPC ha votado en idéntica proporción por reducir en 70.000 millones de libras (80.656 millones de euros) durante los próximos 12 meses el volumen de compras de bonos del Estado británico mantenidos con fines de política monetaria, y financiados mediante la emisión de reservas, hasta alcanzar un total de 488.000 millones de libras (562.286 millones de euros).
Desde 2022, el Banco de Inglaterra ha recortado la tenencia de bonos de 875.000 millones de libras (1,001 billones de euros) a 558.000 millones de libras (642.942 millones de euros) mediante la venta de algunos de los títulos que compró durante los programas de flexibilización cuantitativa ('QE', en la jerga) desplegados con la crisis financiera y la pandemia.
"Sigue siendo adecuado adoptar un enfoque gradual y prudente para seguir relajando la política monetaria restrictiva. Este carácter restrictivo ha disminuido al reducirse el tipo de interés bancario", ha explicado el Banco de Inglaterra en un comunicado.
Desde el instituto emisor han indicado que tanto el momento oportuno como el ritmo de futuras bajadas de tipos dependerá de la medida en que sigan disminuyendo las presiones inflacionistas subyacentes. Los riesgos al alza a medio plazo para la inflación siguen siendo "notables".
"La política monetaria no sigue una trayectoria preestablecida y el Comité seguirá respondiendo a la acumulación de datos", ha resumido, en cualquier caso, la entidad.
INFLACIÓN Y CRECIMIENTO
Desde el banco central han destacado que la desinflación subyacente ha sido "sustancial" durante los últimos dos años y medio y que ha continuado, por lo general, hasta ahora, aunque con las presiones salariales moderándose con más fuerza que los precios.
No obstante, la institución dirigida por Andrew Bailey prevé un "ligero" alza de la inflación este septiembre para volver a converger después con el objetivo del 2%. El MPC ha indicado que estará "vigilante" por si este incremento temporal acaba traduciéndose en un repunte de precios y nóminas.
En cuanto al crecimiento económico, este ha permanecido "contenido" en línea con el debilitamiento observado en el mercado laboral. Los riesgos que atenazan al PIB tanto a nivel interno como geopolítico permanecen invariables.